Con lo que lleva de vida mi blog, estaba pensando en escribir una especie de balance de lo que me parece la literatura española contemporánea. Mientras preparaba el borrador me encontré con estas palabras de Leopoldo Lugones que me ha ahorrado el esfuerzo de escribir ese balance. Con la excepción de los libros recomendados, que calculo que serán un veinte por ciento del total de los reseñados, muy poco es lo que añadiría a las palabras del escritor argentino. Quizá sólo el matiz de que la novela española sigue transpirando un aire aldeano y pueblerino agobiante y claustrofóbico, y que no es por eso extraño que en muchos blogs literarios los libros más recomendados pertenezcan a autores extranjeros. La historia se repite (la cita de Lugones es de 1899, en los años de la renovación modernista):
"los escritores españoles nos parecen monótonos; de pensamiento, no, pero sí de estilo. Nos suenan todos a Cervantes –que es buen sonar– mas la monotonía, aún con Cervantes, nos relaja el tímpano. Sufrimos de ver anquilótica a la sintaxis castellana tan bien vertebrada y tan flexible, y la pobreza de adjetivación que caracteriza a los literatos peninsulares, nos hace el efecto de una densidad gris en que todo color naufraga. Quisiéramos más variedad de ritmo, mayor precisión calificativa, más libertad en ese estilo" (Leopoldo Lugones: Elogios. Buenos Aires, Pasco 2009, pp. 83-84)