Es lo que parece confirmar la
contraportada, escrita sin duda por el departamento de marketing de la editorial,
que se fija sólo en los méritos literarios o humanos de la novela y que en
absoluto quiere venderla como “la gran primera novela vasca” de la que habla
Amaia Gabantxo en su cita.
Y me temo que en esto va a consistir la novela, una historia con intentos de carga humana y habilidades literarias, pero también con bastante militancia cultural y política. Espero que la balanza se incline hacia el primer binomio, para que así justifique el Premio de la Crítica que le dieron en 2003.
Y me temo que en esto va a consistir la novela, una historia con intentos de carga humana y habilidades literarias, pero también con bastante militancia cultural y política. Espero que la balanza se incline hacia el primer binomio, para que así justifique el Premio de la Crítica que le dieron en 2003.