Acabo de leer un estupendo artículo sobre la historia y manera de confección de las listas de los libros más vendidos. Por si a alguien le quedaban dudas, el número de deficiencias y posibles manipulaciones de tales listados es tan alta que parece el catálogo de promesas incumplidas de muchos políticos de turno. Aunque el artículo se centra en el ranking del New York Times y en el mercado estadounidense, creo que se puede aplicar a medios semejantes y a prácticamente todos los países (que pueden darse el necesario lujo de leer).
Entre otras deficiencias sobresalen las siguientes: 1) A veces el libro se cuenta como vendido hasta tres veces: cuando sale de la editorial, cuando sale de la distribuidora y cuando sale de la librería. 2) A menudo no se cuentan los libros devueltos ni a la editorial, ni a la distribuidora ni a la librería. 3) Si la revista o el periódico pertenecen al mismo grupo empresarial que la editorial suele haber conflictos de intereses y posicionamientos extraños (un ejemplo aquí). 4) Las listas suelen concentrarse en periodos de tiempo muy breves (una semana, un mes, etc.); el resultado sería muy diferente si abarcaran un año, un lustro, etc. Aquí ganan los clásicos y los llamados 'long-sellers' (El Quijote, Shakespeare, Biblia, ). 5) El tipo de librería consultada condiciona también los resultados, pues no es lo mismo la venta en una gran superficie que en una librería universitaria, o que en una de barrio y en una librería de antiguo...). 6) Existencia de casos en los que una subsidiaria de la editorial compra una gran cantidad de ejemplares de un título para hacer subir a ese título en el ranknig de ventas, 7) A veces los ejemplares regalados para publicidad o reseñas se cuentan como libros vendidos. 8) Etc.
Y a todo esto podría añadirse ahora la venta de libros por internet, bien de librerías reales o virtuales, que creo que complica todavía más la cosa.
En fin, que no es que haya que despreciar esas listas pero tampoco hay que tomarlas muy en serio. Lo mejor es leerse las reseñas de blogs como éste :-), o como los que aparecen enlazados aquí, y luego invertir los dineros en libros que merezcan la pena (Laura J. Miller: "The Best-Seller as Marketing Tool and Historical Fiction." Book History 3 [2000], pp. 287-304).